Os dejo una redacción que he escrito esta semana para una asignatura que curso sobre astronomía. Trata sobre un muchacho alemán del siglo XIX, médico y astrónomo, y su hipótesis particular sobre la demostración visual del universo infinito.
¡Saludos desde la noche!
¿Es el color oscuro del cielo nocturno una evidencia de la infinitud del Universo? En un principio responderíamos lo siguiente: Sí. Cuando observamos el firmamento en una noche estrellada queda demostrada su indescriptible amplitud entre la que aparecen suspendidos los brillantes astros entre un mar negro e interminable.
¿Una evidencia o una contra-evidencia? En 1823, el astrónomo alemán Heinrich Olbers dedujo que si el Universo fuera infinito, al alzar la vista durante la noche, ésta no sería oscura, sino que estaría plagada de brillantes estrellas no observando oscuridad en el firmamento nocturno. Es decir, Olbers llegó a la conclusión de que si el Universo fuera infinito, la noche no sería noche.
Pero esta paradoja, “no tan paradoja” tiene varias resoluciones:
- El Universo es infinito en el espacio pero no en el tiempo:
El Universo tiene un pasado definido, una edad de unos 13000 millones de años, por lo que la luz de las estrellas más lejanas (más antiguas) a nosotros no ha llegado aún a nuestra localización, no siendo observables. Es decir, sólo podemos observar los astros más cercanos a nuestro planeta.
- Si esta luz, de estas lejanas estrellas llegara a nosotros, sus longitudes de onda serían tan extremadamente amplias que nos serían inobservables:
Sabemos que si observamos una galaxia lejana, su brillo se desplaza hacia la región infrarroja. Si observamos otra galaxia mucho más lejana, la radiación emitida como luz visible por ésta la recibiríamos como ondas de radio… Por lo que una galaxia mucho más lejana aún nos sería indetectable con la tecnología que poseemos actualmente.